Las Incubadoras de Empresas son instituciones que aceleran el proceso de creación, crecimiento y consolidación de empresas innovadoras a partir de las capacidades emprendedoras de los ciudadanos. Estas instituciones pueden compararse con laboratorios de empresarismo de la época, cuyos insumos son ideas y equipos de conocimiento y los productos son empresas rentables. Su principal labor consiste en transferir a los emprendedores una forma de pensar: el pensamiento empresarial.

La incubadora busca además, garantizar la viabilidad de los sistemas empresariales que crea. Esto lo hace para asegurar la autogestión (empresas con capacidad de adaptarse sin perder su estructura), el autocontrol (empresas con capacidad de capturar la información y conocimientos necesarios para su retroalimentación) y la autonomía (que tengan la capacidad de asegurarse sus recursos humanos, materiales, de inversión y de información).

Las incubadoras de empresas de las cuales el SENA es socio, son organizaciones sin ánimo de lucro, conformadas con un carácter tripartito a través de alianzas ente el sector público, privado y educativo.